Municipales y el PRSD
Las elecciones Municipales son un buen medio para analizar la participación real del PRSD, puesto que los cambios en las leyes electorales generan diversos incentivos que hacen variar las negociaciones internas que ocurren dentro de la Concertación.
El primer gran cambio ocurrido en el sistema electoral que rigen los comicios electorales comunales fue en el año 1995, para efectos de las elecciones de 1996. El mecanismo por el cual fueron escogidos los representantes de las comunas se reestructuró de tal forma que el alcalde ganador del escaño, debía obtener sobre el 30% de la votación, renegando al resto al consejo municipal. Esto tuvo dos consecuencias. La primera consecuencia, fue que las elecciones se transformaron en una disputa por la alcaldía, y los escaños al consejo quedan en segundo plano. Así la concentración de votos debía darse para el candidato del alcalde, lo que provocaría un chorreo para los candidatos al consejo. La segunda consecuencia de esta reforma tuvo que ver con la capacidad de las coaliciones, en este caso de la concertación, para designar a su mejor opción con miras a la alcaldía. Este mecanismo se utilizó en las elecciones de 1996 y las del año 2000.
En las pasadas elecciones municipales efectuadas en el año 2004, se reformó nuevamente el sistema electoral. La reforma consistió en la separación de la elección de los representantes de la comuna. De esta manera nos encontramos en jornadas electorales donde concurren elecciones tanto para alcaldes, como para concejales. Autoridades en la materia, han señalado que este cambio trajo consigo una democratización a los gobiernos municipales.
A nivel de coalición el nuevo sistema electoral, reduce los incentivos para una negociación de los candidatos que se presentan a las elecciones del consejo municipal. En cambio, para el caso de los alcaldes, las coaliciones siguen teniendo la necesidad de negociar para presentar un candidato único por comuna. Los beneficios que esto trae consigo para el Partido Radical Socialdemócrata se ve reflejado en la presentación de candidatos al consejo, ya que el número de escaños que se disputan es mayor, lo que le da mayores posibilidades a los partidos pertenecientes a la concertación de presentar candidatos en casi todas las comunas. De esta manera podemos señalar que el espacio real que dan las nuevas leyes electorales para que se incluyan nuevos actores políticos se da precisamente a nivel comunal, puesto que las negociaciones disminuyen e inmediatamente se generan incentivos para que los partidos recluten mayor cantidad de militantes que estén dispuestos a presentarse a elecciones.
Vemos que la votación del Partido Radical Socialdemócrata, adquiere la característica de ser constante, y se hace necesario el buscar nuevas fórmulas electorales que permitan la obtención de un mayor número de escaños en las elecciones municipales. Las leyes electorales ya cambiaron y se mantendrán para las elecciones que se llevarán a cabo el año 2008. Ahora, la tarea es de los partidos a generar nuevos espacios que incluyan a una generación de recambio, lo que a su vez, podría traer consigo favorables resultados.
Otro de los factores que atañen a la Juventud Radical, va de la mano que las elecciones municipales son la base para que los jóvenes militantes comiencen su carrera política. Las elecciones a concejales servirían como un piso para éstos comiencen a desarrollar políticas que de la mano del ya nombrado recambio generacional, le ofrezcan al elector nuevas y mejores posibilidades dentro de la comuna.
Esto lo argumentamos de la manera que la negociación que la coalición debería llevar a cabo, debiese ser más amplia y con menos barreras de entradas para los nuevos actores. Los partidos se enfocarían más en el cupo de la alcaldía, dando ciertas libertades de presentar candidatos a concejales. La negociación para el Partido Radical Socialdemócrata, debiera ser llevada de la mano de un estudio electoral, en donde se prioricen las comunas en donde la elegibilidad de nuestro partido, y de la concertación, sea favorable.
En las elecciones pasadas, la participación de la JR fue nefasta. Se llevaron candidatos a concejal en la Región Metropolitana, en las comunas de Providencia, Recoleta, Estación Central, San Bernardo, Lampa, Puente Alto y La Florida. En algunos casos, la competencia de los correligionarios de la juventud, se veía opacada con que el partido llevara dos candidatos, uno adulto y uno de la juventud, lo que a su vez traía como consecuencia una dispersión de los votos del Partido Radical, lo que muchas veces provocó que ninguno de los dos candidatos obtuviese el escaño al consejo municipal.
Para concluir, observamos que las reformas a las que han sido sometidas las leyes electorales para las elecciones municipales, podrían ser de vital importancia para revertir de manera positiva los resultados que históricamente se han comportado de carácter constante. Es de suma importancia que el partido genere nuevas caras, y negociaciones que favorezcan tanto al partido, como a la juventud radical y a la concertación
